Recientemente se ha reabierto el debate sobre el problema terminológico para nombrar la violencia hacia las mujeres, que cada año nos deja decenas de muertes. El fiscal granadino, Javier García Rull,que vino a visitarnos recientemente, ha desatado una tormenta en un artículo publicado en el diario IDEAL el 12 de febrero de 2012, con el siguiente artículo:
¿Qué opináis vosotros?
Pues...opino que lenguaje y pensamiento van tan unidos que tal y como nos expresamos así nos definimos. Con ese artículo este señor queda retratado.
ResponderEliminarY otra cosa soy "feminista de la igualdad" y no tengo en mi pensamiento nada para generar, trasmitir o vincular mi ideología con el odio.
Gracias y saludos feministas
La verdad es que parece hasta fácil rebatir a este señor que no sé qué visión tiene del feminismo. No sé si se relaciona con el término "feminazi" que utilizan algunos, pero a mí eso de que hable de la ideología del odio, del olvido de menores, ancianos u homosexuales, e incluso relacionándolo con el marxismo, como una hidra con muchas cabezas (a saber qué quiere decir con eso...), es algo que me ofende personalmente.
ResponderEliminarY por supuesto, como decía Cristina antes, lenguaje y pensamiento están radicalmente unidos, por lo que sí que hay que cuidar las formas y llamar a cada cosa por su nombre y no se puede limitar a denominar este tipo de violencia como "doméstica" (<DOMUS: casa) porque no se produce sólo en la casa, ni entre parejas que viven bajo el mismo techo. Y la violencia hacia otros grupos tiene necesariamente que llamarse de otra manera, porque las causas que la inducen no son ni mucho menos las mismas.